Siempre se ha sabido por los medios desde hace eones, que Avast, AVG y todos los complementos que tienen para los navegadores con fines de seguridad, tenían telemetría y envían los usos cotidianos e información de sus usuarios, que luego estos vendían.
Cuando un producto es gratis, de gratis al final no tiene nada, el producto es uno mismo quien lo acaba siendo si se emplean sus soluciones. Al fin y al cabo, son empresas y de algo deben de vivir, el problema es cuando rebasan ya la legalidad, como en este caso y son cazadas.